Así como la nutrición o la salud mental influyen directamente en nuestro bienestar general, debes saber que tener una buena salud bucodental es imprescindible para tener una salud completa. Y es que, ignorar problemas o síntomas de un mal funcionamiento bucodental va empeorando nuestra salud.

La salud bucodental completa es importante debido a la conexión bien documentada entre la boca y el resto del cuerpo. Y es que, tener una buena salud bucodental no consiste en cepillarse los dientes, usar hilo dental a diario y tener los dientes blancos. Conlleva el control de las bacterias presentes en la boca para evitar infecciones o inflamaciones, en beneficio de la salud de la boca y de su organismo en general.

Hoy te explicamos los riesgos y consecuencias que conlleva una mala salud bucodental, no solo para la salud de los dientes y encías, sino para la salud de todo el cuerpo; y te enseñamos cómo tener una salud bucodental completa.

¿Cuál es la conexión entre la salud bucal y la salud general?

Tu salud bucal manda pistas sobre el estado de tu salud general, y los problemas de tu boca pueden afectar al resto del cuerpo.

Y es que, la boca es el punto de entrada a tus vías digestivas y respiratorias, y algunas de estas bacterias pueden causar enfermedades. Normalmente, las defensas de tu cuerpo y un buen cuidado bucal mantienen las bacterias que pueden causar enfermedades bajo control. Sin embargo, se pueden producir algunas enfermedades bucodentales como caries o problemas de encías. Además, algunos medicamentos como descongestionantes o analgésicos pueden derivar en alguna enfermedad. En este sentido, tu salud bucal puede contribuir a varias enfermedades y afecciones como:

• Endocarditis: Es una infección del revestimiento de las cámaras o válvulas cardíacas que se produce cuando las bacterias u otros gérmenes de otra parte del cuerpo, como la boca, se propagan a través del torrente sanguíneo y se adhieren a ciertas zonas del corazón.
• Enfermedades cardiovasculares: La enfermedad cardíaca, las arterias obstruidas y el accidente cerebrovascular podría estar relacionados con la inflamación y las infecciones que las bacterias bucales pueden causar.
• Complicaciones durante el embarazo y el parto: La periodontitis se ha relacionado con el nacimiento prematuro y el bajo peso al nacer.
• Neumonía: Ciertas bacterias presentes en la boca pueden ser arrastradas hacia los pulmones y, en consecuencia, causar neumonía y otras enfermedades respiratorias.

Por el contrario, existen determinadas enfermedades que pueden afectar a tu salud bucodental, como la diabetes (ponen en riesgo las encías), el VIH (provoca lesiones dolorosas de la mucosa), la osteoporosis (ocasiona pérdida de hueso periodontal y la pérdida de dientes) o el alzheimer (con un empeoramiento de la salud bucal). Estas enfermedades reducen la resistencia del cuerpo a las infecciones, provocando que los problemas de salud bucal sean más graves.

A todo esto, hay que sumar los trastornos alimentarios, la artritis reumatoide, ciertos tipos de cáncer y un trastorno del sistema inmunitario que causa deshidratación en la boca (síndrome de Sjogren).

¿Cuáles son las enfermedades bucales más frecuentes?

Las enfermedades más frecuentes de la boca afectan a los dientes o al tejido que los soporta. Esta enfermedades aparecen si no se elimina correctamente la placa bacteriana mediante una adecuada higiene bucal. Los problemas más comunes son:

• Caries: Es la destrucción progresiva del diente, que empieza con el desgaste del esmalte.
• Sensibilidad: Es resultado del desgaste del esmalte dental o de la exposición de las raíces de los dientes. Sin embargo, algunas veces, es causado por otros factores como las caries, dientes agrietados o astillados, un empaste desgastado o una enfermedad en las encías.
• Gingivitis: Es la acumulación de placa dental que inflama las encías, se hinchan y sangran.
• Periodontitis: Es como la gingivitis pero más grave. En este caso es infeccioso, por lo que se puede extender y a afectar a los ligamentos y el hueso que soportan el diente. En estos casos, el diente se destruye, lo que con frecuencia lleva a la pérdida de la pieza dental.

Otros factores de riesgo a incluir son los dientes pocos saludables, el tabaquismo, el consumo nocivo de alcohol o tener una higiene bucodental deficiente.

¿Cuáles son los síntomas de las enfermedades gingivales?

Además de las molestias al masticas, las encías enrojecidas y la pérdida de la forma redondeada de la encía, existen otros síntomas que pueden indicar la presencia de una gingivitis:

• Sangrado de la encía: Es el principal signo que alerta de que hay una encía enferma que necesita tratamiento.
• Inflamación: Es un síntoma a tener en cuenta pero muchas veces pasa desapercibido a casa del tabaquismo o el uso de enjuagues antisépticos.
• Constante mal aliento: Si dejas que la placa bacteriana se acumule en tu boca, las toxinas que producen pueden provocar halitosis.

Por último, existen señales que muestran que la enfermedad periodontal esta muy avanzada; como la movilidad de algún diente debido a la pérdida de gran parte del hueso, o la aparición de espacios entre los dientes.

¿Cómo debo cuidar mi boca para tener una buena salud bucodental?

Para proteger tu salud bucal, lo principal es tener una buena higiene bucal.

• Cepíllate los dientes, encías y lengua cuidadosamente 3 veces al día durante, después de cada comida, dos minutos cada vez.
• Usa hilo dental o cepillo interproximal todos los días para limpiar los espacios interdentales y eliminar los restos de comida de entre los dientes.
• Usa enjuague bucal para eliminar las partículas de comida que quedan.
• Cambia tu cepillo de dientes cada 3 ó 4 meses o antes si las cerdas están abiertas o gastadas.
• Sigue una dieta saludable y limita los alimentos y bebidas azucaradas.
• Evita el consumo de tabaco.
• Acude a revisión médica y limpiezas dentales regularmente.

¿Cuándo acudir a un dentista?

Se recomienda realizar una revisión de tus dientes al menos una vez al año. Y además, como un cepillado profundo no consigue eliminar por completo la placa dental, se recomienda realizarse una limpieza de boda cada 6 o doce meses.

Asimismo, se recomienda acudir al dentista en los siguientes casos:

• Si sufres un dolor en los dientes que no tiene causa aparente o provocado por los alimentos, bebidas, cepillo o uso del hijo dental.
• Cuando sientas excesivas sensibilidad en el consumo de bebidas o alimentes fríos y/o calientes.
• Si tienes las encías rojas, hinchadas o sangran al cepillarte.
• Cuando sufras mal aliento.
• Cuando tengas los dientes flojos.

Recuerda que …

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